La reforma de un suelo radiante es un proceso que requiere planificación, experiencia y materiales de calidad para garantizar su correcto funcionamiento. Ya sea por una avería, una actualización del sistema o una remodelación completa de la vivienda, reformar este tipo de calefacción supone un trabajo meticuloso que debe llevarse a cabo con precisión. Desde nuestra empresa de reformas de cocinas en Málaga, sabemos que a las personas que tienen que realizar estos cambios en casa les preocupan muchas cosas, por eso en el artículo de hoy te explicamos cómo se realiza, cuánto tiempo puede tardar y qué imprevistos pueden surgir durante la obra.
¿Cómo se lleva a cabo la reforma de un suelo radiante?
El primer paso en la reforma de un suelo radiante es la evaluación del estado del sistema existente. Se debe determinar si se trata de un problema puntual en alguna zona concreta o si es necesario renovar toda la instalación. Para ello, se pueden realizar pruebas de presión en los circuitos de tuberías para detectar fugas o fallos en la distribución del calor.
Una vez analizado el estado del suelo radiante, se procede a la retirada del pavimento y de la capa de mortero que cubre las tuberías o el cableado eléctrico, dependiendo del tipo de sistema instalado. En esta fase es crucial trabajar con herramientas especializadas para evitar daños en la estructura del suelo o en la instalación hidráulica. Después de retirar la instalación antigua o reparar las secciones necesarias, se instala la nueva red de tuberías o cables calefactores. Este paso debe realizarse con precisión, asegurando una distribución uniforme del calor para evitar zonas frías o sobrecargas en determinadas zonas. Finalmente, se aplica una nueva capa de mortero autonivelante y se coloca el pavimento seleccionado, que debe ser compatible con el suelo radiante para garantizar su eficiencia térmica.
Posibles imprevistos en la reforma de un suelo radiante
Como en cualquier obra, en la reforma de un suelo radiante pueden surgir imprevistos que afecten al tiempo y precio del proyecto:
- Tuberías dañadas o deterioradas: al retirar el pavimento, se pueden encontrar tuberías en mal estado o con fugas, lo que obliga a sustituir parte o la totalidad de la instalación.
- Falta de aislamiento térmico: en viviendas antiguas, el suelo puede no contar con un buen aislamiento, lo que reduce la eficiencia del sistema y puede requerir la instalación de una capa aislante adicional.
- Incompatibilidad del nuevo pavimento: algunos materiales, como ciertos tipos de madera o laminados, pueden no ser adecuados para la transmisión del calor, afectando el rendimiento del suelo radiante.
¿Cuánto tiempo tarda la reforma de un suelo radiante?
La duración de la reforma de un suelo radiante puede variar según el tamaño del zona a renovar y el tipo de intervención que se necesite. En general, una reforma parcial que solo implique la reparación de ciertas zonas puede llevar entre 3 y 5 días, mientras que una renovación completa de la instalación puede prolongarse hasta 2 o 3 semanas.
El tiempo total también dependerá del secado del mortero y del tipo de revestimiento final. Algunos materiales, como el porcelánico o la piedra natural, pueden requerir más tiempo de instalación y adaptación térmica antes de poner en marcha el sistema de calefacción.
Consejos para una reforma eficiente y duradera
Para garantizar el éxito de la reforma de un suelo radiante, es fundamental contar con profesionales especializados que evalúen correctamente la instalación y trabajen con materiales de calidad. Elegir el tipo de suelo adecuado, planificar los tiempos de secado y probar el sistema antes de finalizar la obra son pasos clave para evitar problemas a largo plazo. Si quieres más información sobre los diferentes tipos de servicios que podemos ofrecerte, no esperes más y ponte en contacto con nosotros.